lunes, diciembre 13, 2004

La habitación del pánico

Soy un cabrón. Sí, y lo reconozco. Manipulo la mente y el corazón de una persona como el gobierno Bush hace con el pueblo norteamericano. Claro que no es lo mismo usar el miedo para manipular a tu hermana que para ganar unas elecciones...Vale, estoy exagerando, pero cuando lo explique lo entenderéis

Por suerte o por desgracia (suerte a veces, desgracia a menudo) tengo una hermana pequeña, muy pequeña, me llevo 18 años con ella. El caso es que, como todo hermano pequeño, es muy mona pero muy muy pesada. La niña en cuestión tiene una especie de obsesión con mi cuarto que hace que a menudo quiera entrar en él y darme un poco la vara (lo cual a mi madre le va que ni pintado para descansar un rato). Digamos que para ella hasta hace poco mi cuarto era El Mundo Perdido, pero con el paso del tiempo ella, cual velociraptor, ha aprendido a abrir puertas sola, y de una forma algo bruta, como los susodichos seres.

Ante el peligro que supone que mi hermana pueda entrar a mi habitación en cualquier momento si estar yo presente y en pos de la preservación de mi espacio natural, he llevado a cabo una táctica para disuadirla de penetrar en mis aposento. La he llamado Libertad Duradera (¿de qué me sonará a mí esto?) y consiste en hacerle creer que en mi armario habita un demonio de los avernos que saldrá a morderle el cuello si entra sin mi compañía. ¿Un poco cruel? Pse...la verdad es que, aunque se lo traga, se lo toma con bastante humor e incluso la he visto entrar sola antes que yo, con lo que deduzco que de mayor será o un poco temeraria o una tía con muchas agallas .

Es posible que si su valentonería sigue en aumento tome medidas más drásticas. Hago un llamamiento a todos los herman@s mayores, ¡unidos jamás seremos desobedecidos! .

Salu2 .

PD: Sí, es un post estúpido, pero con algo tengo que llenar esto ¿no? .

No hay comentarios: